No estamos al margen, estamos con la sociedad.

Intervenimos en fallecimientos, en el maltrato de niños o luchando contra la pornografía infantil.
Visitamos ancianos para regularizar su situación.
Reconocemos a las víctimas de accidentes lo que les corresponde.
Un juez no sólo envía a supuestos delincuantes a la cárcel, también tratamos con personas sin recursos y con víctimas de delitos.
Revisamos cláusulas abusivas de consumidores o autorizamos trasplantes de órganos.
Es nuestro trabajo y lo hacemos con la responsabilidad de un Poder de Estado.
No estamos al margen.